La terapia cognitiva conductual te ayuda a tomar conciencia de pensamientos imprecisos o negativos para que puedas visualizar situaciones exigentes con mayor claridad y responder a ellas de forma más efectiva; puede ser una herramienta muy útil y eficaz para ayudar a cualquier persona a aprender cómo manejar mejor las situaciones estresantes de la vida.
La terapia cognitiva conductual se utiliza para tratar una amplia gama de problemas. Con frecuencia es el tipo preferido de terapia porque puede ayudarte rápidamente a identificar y afrontar desafíos específicos. Generalmente requiere menos sesiones que los otros tipos de terapia y se realiza de forma estructurada.
Por ejemplo, puede ayudarte a lo siguiente:
1.- Controlar los síntomas de enfermedad mental
2.- Prevenir recaídas de síntomas de enfermedad mental
3.- Tratar una enfermedad mental cuando los medicamentos no son una buena opción
4.- Aprender técnicas para lidiar con situaciones estresantes de la vida
5.- Identificar formas de controlar las emociones
6.- Solucionar conflictos en las relaciones y aprender mejores formas para comunicarse
7.- Afrontar el dolor o las pérdidas
8.- Superar traumas emocionales relacionados con el maltrato o la violencia
9.- Afrontar una enfermedad médica
10.- Controlar los síntomas físicos crónicos